Salario Mínimo, ¿otra vez la “mecedora”?
Alan Fairlie
El gobierno anunció la discusión de un aumento del salario mínimo para el primer trimestre del próximo año. Esta declaración, seguramente busca calmar a los trabajadores, mientras en estos días publica cambios significativos en la legislación laboral. Promesas de aumento, realidades de derechos afectados.
Salen los argumentos empresariales de siempre: no hay condiciones, la informalidad es alta, alcanza solo a una minoría, afecta a las pymes, no se debe politizar un asunto técnico, es una medida populista (aunque acá no les falta razón)
Debate teórico
Más del 90% países miembros de la OIT presentan un salario mínimo. La finalidad de este salario es proteger a los trabajadores contra salarios extremadamente bajos. Este mecanismo facilita que todos los individuos se beneficien de una distribución justa ante escenarios económicos de progreso y también para reducir la pobreza y desigualdades.[1]
La OIT indica que para realizar los ajustes de la RMV se debe tener en cuenta principalmente las necesidades de los trabajadores y de sus familias. Para esto el aumento de los precios y el costo de vida son determinantes relevantes a considerar. Otro tema a tener en cuenta son los factores económicos, los cuales proveen información sobre la productividad de un trabajador promedio. También se menciona que se deberá considerar el impacto de un aumento de los salarios mínimos en la estructura global de los salarios y las personas que ya se encuentran trabajando. En suma, no solo se debe considerar la productividad.
De otro lado, se considera al salario solo como un costo para el empresario, y se olvida que es un factor de demanda. Además, los trabajadores, lo destinan casi íntegramente al consumo, ya que no les alcanza para ahorros significativos. Una mayor masa salarial, contribuye entonces a la reactivación de la economía, y la generación de nuevos empleos.
Cuál de los efectos predomina, pasa por la evidencia empírica. Las alzas de los últimos años, no han generado los efectos negativos que se anuncian otra vez. Y, la canasta básica no se cubre con la RMV asciende a S/.930.
Debate sobre el monto
Ante esta coyuntura el debate por el monto al cuál ascendería la RMV ha surgido, entre algunas de las posturas: el Secretario General de la CGTP, Geronimo López, indicó en que el sueldo mínimo debe ir a la par con el costo y en el 2014 el Instituto Nacional de Estadística (INE) dijo que la canasta básica para una familia de 5 personas era de S/.2,460. Sin embargo, manifiesta que es imposible en este momento subir el sueldo a esta meta, por ello plantean un aumento a S/.1,500 y luego se aumente progresivamente hasta llegar a cubrir la canasta básica.[2] En la misma entrevista el ex-viceministro de Trabajo, Fernando Cuadros, indicó que en sus cálculos el aumento que correspondería sería de S/.120, con lo cual el salario mínimo ascendería a S/.1,050.[3]
Más allá de la discusión sobre el monto, el salario debe subir gradualmente, si hacemos caso a los criterios de la OIT presentados líneas arriba. Debemos evitar que las brechas de ingresos y las desigualdades se profundicen, para no tener que lamentarnos después. Pero, parece el gobierno quiere aplicar “la mecedora”. Debates sobre aumentos hipotéticos, mientras muy concretamente se siguen dando cambios en la legislación laboral e implementando el llamado “plan de productividad y competitividad”.
Foto: Andina
[1] OIT. ¿Qué es un salario mínimo? Véase: https://www.ilo.org/global/topics/wages/minimum-wages/definition/lang–es/index.htm
[2] Sueldo mínimo vital: ¿Cuánto debe ser el sueldo mínimo vital en el Perú? (05.11.19). Véase: https://www.youtube.com/watch?v=A7f01coz8ao
[3] Ibíd.