Las políticas y los directorios
Artículo publicado en Diario Uno
El ministro Thorne anuncia un ajuste en el último trimestre. El “destrabamiento” de proyectos de inversión pública, y los “animal spirits” empresariales, deberían ser más potentes que el ajuste fiscal anunciado por el ministro, para no contribuir a la desaceleración de la economía.
Señalan que la situación está peor que lo que pensaban, y que el déficit proyectado de 3.8% del PBI está privilegiando la inflación sobre la reactivación. Pero esta ya se ubica en el rango meta del BCR. Y las promesas a las regiones de mayor presupuesto y descentralización, para el próximo año? Habrá que esperar las medidas que se impulsen con las facultades delegadas por el Congreso, pero parece mucho énfasis en la denominada formalización, sin necesariamente arreglar el problema de producción y empleo. Solo un tímido aumento del drawback para las exportaciones no tradicionales, nada de política comercial para enfrentar la competencia desleal. Medidas tributarias para flexibilizar carga al sector empresarial buscando aumenten las inversiones, así como para repatriar capitales del exterior.No funcionaron en gobierno anterior,esta vez sí?
EL BCR no bajó la tasa de interés cuando se requería, privilegió el manejo de encajes,y perdió importantísimas reservas internacionales netas, por mantener reprimido el tipo de cambio y la inflación en el rango meta. La continuidad de su presidente, la mayoría en el directorio y los nuevos directores electos (que no podrán discutir las opciones) lo más probable es que mantengan los lineamientos en curso. Qué harán frente a la próxima subida de la tasa de interés en EEUU, el retiro de flujos de capital de países emergentes? La combinación de política fiscal y monetaria no tiene como prioridad la reactivación y los empleos, y más bien actuará en la dirección contraria.
Se crearon grandes expectativas en la población, y ya hay signos de temprana crisis política en el gobierno. Un enfriamiento o recesión de la economía complicará el panorama, y agudizará los conflictos. Los guiños a Fuerza Popular en puestos claves de la administración pública y el manejo de políticas, que controla el Congreso, parecen ser un llamado de auxilio adelantado, que posiblemente no sea atendido como el gobierno espera. La agudización de conflictos y desgaste prematuro del gobierno serían las consecuencias lamentables si ese escenario se concreta