EL PAPEL DE LAS TECNOLOGÍAS DIGITALES PARA ENFRENTAR LOS EFECTOS DE LA PANDEMIA

Alan Fairlie Reinoso

Siendo el distanciamiento social la principal herramienta para contener el avance del virus en la región, muchos de los paises empezaron a realizar sus actividades de forma remota, visualizando la enorme brecha en materia digital que existe, especialmente en términos de tecnologías digitales, así como infraestructura de comunicaciones y el acceso a las mismas. Para abordar estos desafíos la Cepal público el informe titulado “Universalizar el acceso a las tecnologías digitales para enfrentar los efectos del COVID-19”[1]

Lamentablemente la brecha digital se traduce en una mayor profundización de las desigualdades en la región, ya que solo el 38 y el 53% del primer y segundo quintil de hogares de la región tiene acceso a conexión de interés y este porcentaje se reduce aun más para el caso del Perú, en donde solo el 3% del primer quintil tiene acceso a este servicio, no obstante las diferencias, tiende a acrecentar más en las zonas rulares en donde más del 90% de los hogares peruanos no cuentan con conexión a internet, encontrándose por encima del promedio de la región (77% de los hogares rurales no está conectado); limitando de esta forma las oportunidades de ejercer servicios como educación en línea, telemedicina y teletrabajo.

De otro lado, la condición socioeconómica de los hogares limita tanto el acceso a internet como a recursos tecnológicos como los celulares, lo cual implica mayores niveles de desconexión, pues el costo de estos servicios representa entre el 14% y 12% de los ingresos de los hogares que se ubican en el primer quintil a nivel de la región. Por otro lado, alrededor del 66.6% de los paises de la región no alcanzan los requerimientos de velocidad de descarga necesarios para desarrollar soluciones digitales, lo cual implica que no se puedan desarrollar de forma simultánea dos actividades con la misma banda ancha.

Gráfico Nº1 : Tecnologías digitales y COVID-19

A pesar de las limitaciones estructurales, la digitalización se ha convertido en una herramienta clave en la lucha contra el Covid -19. La Cepal estima que, entre el primer y segundo trimestre de 2020, el uso de soluciones de teletrabajo aumentó 324%, el e–commerce en 157% y la educación a distancia más de 60%, avances que eran previstos que tomarían varios años pero se aceleraron como consecuencia de la pandemia.

Limitantes de las principales soluciones digitales:

Teletrabajo. – es uno de los principales mecanismos que ha venido siendo impulsado por los paises de la región, sin embargo, este es susceptible a los diferentes factores desde las estructuras de mercado, los procesos productivos, así como el nivel de informalidad y la calidad de la infraestructura digital; es así que, de estos factores dependen los puestos de trabajo que pueden migrar al teletrabajo. En el caso de América Latina solo el 21,3% de los ocupados podría teletrabajar, y por sectores el teletrabajo se podría desarrollar en el 80% en los servicios profesionales, científicos y técnicos, la educación, las finanzas y los seguros. Sin embargo, en la región estos trabajos apenas representan el 20% de los ocupados. Asimismo, en los quintiles I, II y III de salarios, más del 80% de los ocupados no puede teletrabajar.
Educación en línea. La educación remota solo es posible para quienes cuentan con conexión a Internet y dispositivos de acceso, no obstante, el 46% de los niños y niñas de entre 5 y 12 años de la región vive en hogares que no están conectados a Internet, lo que significa más de 32 millones de niños y niñas. En el caso del Perú, más del 90% de los niños y niñas de los hogares más pobres viven en hogares sin conexión a Internet. Esta situación, condiciona el derecho a la educación y profundiza las desigualdades socioeconómicas, por lo cual se debe aumentar no solo la conectividad y la infraestructura digital, sino también las habilidades digitales de los docentes y la adaptación de los contenidos pedagógicos.
Telemedicina. Esta modalidad de prestación de servicios de salud, tienen grandes ventajas en el actual contexto puesto que aumenta la capacidad de prevención de enfermedades, descongestión los centros de salud y hospitales, y frenar la transmisión del Covid-19. Sin embargo, nuestros países no cuentan ni con la estructura ni las políticas y estrategias para la prestación de servicios de salud de forma electrónica o resoluta, solo un 56 % de los países de América Latina cuenta con algún tipo de normativa.
Comercio electrónico y digitalización de empresas. El comercio electrónico se vuelve esencial en estos tiempos, sin embargo, a nivel de digitalización los procesos productivos se encuentran muy rezagados en la región, ya que solo el 37% de las empresas latinoamericanas utilizan las tecnologías digitales en los procesos de gestión, aprovisionamiento, procesamiento, manufactura, operaciones y canales de distribución.

Medidas de política y soluciones digitales

El aumento en el uso de estas plataformas hace necesario fortalecer los marcos regulatorios y para hacer frente a problemas propios de la economía digital como: privacidad en los datos, competencias y poder de mercado, y tributación. En el siguiente cuadro se detalla cada uno de ellos:

El papel de las tecnologías digitales en la reactivación

La reactivación de la economía de la región requerirá que los paises trabajen en cambiar su estructura de producir a fin de mejorar sus niveles de productividad. En ese sentido, las economías de la región deberán transitar hacia sistemas productivos más diversificados, promover la inclusión productiva, que permitan generar mayores niveles de empleo. Es así como la Cepal propone cinco líneas de acción dentro de los procesos de reactivación:

Universalizar el acceso para una sociedad digital inclusiva: ampliar la cobertura de banda ancha fija y la velocidad de conexión en banda ancha móvil para cerrar brecha de acceso.
Impulsar la transformación productiva: fomentar el uso de tecnologías digitales en las pymes; digitalización de cadenas de aprovisionamiento; innovación y fortalecimiento del ecosistema digital.
Promover confianza y seguridad digital: marcos regulatorios con normas de uso de datos por empresas y gobiernos, privacidad y seguridad cibernética.
Fortalecer la cooperación digital regional: infraestructuras digitales, redes 5G, acceso universal a banda ancha, políticas de competencia y regulación e impuestos digitales, Mercado Digital Regional, espacios de cooperación subregional.
Un nuevo modelo de gobernanza para un ‘Estado de bienestar digital’ con igualdad, derechos económicos, sociales y laborales, uso seguro y privacidad de los datos, para el cambio estructural progresivo.

Balance:

Coincidimos con Cepal, ya que promover la digitalización es fundamental, y no podemos permitir que las brechas de desigualdad se acrecienten aún más. Debemos de apuntar por un crecimiento sostenible y diversificado, donde una de las herramientas sea la adopción de nuevas tecnologías y la consolidación del entorno digital. Desde mi labor como parlamentario andino he venido impulsado medidas orientadas a promover productividad de nuestras economías bajo un enfoque integral y una de estas iniciativas es el Marco Normativo para la Transformación hacia la Economía Digital en los Países Andinos, el mismo que busca impulsar la transformación digital sostenible e inclusiva, así como el desarrollo del mercado digital en la región andina, con el objetivo de mejorar el bienestar de la sociedad, la productividad de las empresas y la eficiencia del gobierno, además de contribuir a la aceleración del crecimiento económico, además de fortalecer las agendas digitales de los Estados miembros.

[1] Este artículo es un resumen de los principales puntos abordados en el informe “Universalizar el acceso a las tecnologías digitales para enfrentar los efectos del COVID-19” de la CEPAL.

Foto: CAF